Ayer llegó a mi casa un aviso de Fnac diciendo que el libro que encargué ya lo tienen en la tienda. ¡Pero a qué precio! (Supongo). Es una putada esto de estar solo en una casa que no es la tuya y que suene el telefono una y otra vez, te crees ladrón. (Se cree el ladrón...) El caso es que hoy es viernes (como cada viernes) y tengo en mi casa una certificación de Fnac diciendo que el libro que encargué ya lo tienen en la tienda. Un año, por lo menos, buscando ese libro. Al fin.Hoy las lentillas han amanecido nubladas sin embargo mi tia ha limpiado los cristales de esta habitación y despues de tres años, se ve la calle con sus coches, sus obras y sus luces apagadas. Joder con el telefono, que gente más pesada. El dia que yo coja el telefono en casa ajena pueden irse corriendo. Se trata de un acto diabólico.
Hace una semana y tres dias que mi perro no está por aquí y no se me va de la cabeza. Supongo que será un evento que jamás borraré y siempre lo tendré presente. Como el hecho de que tengo tres separadores de paginas (uno especialmente bonito de un cuadro de Van Gogh). Puede parecer una irresponsabilidad o trivialidad escribir esto, pero para mí no lo es. Los pelos que soltaba se ve que se me colaron los las fosas nasales y pinchan mi cerebro desde abajo, tapando las grietas del Prestige por el que goteaba moco nauseabundo.
Estés donde estés, perro mío, te mando un besazo en ese hocico tuyo con aquellos bigotitos que te olían tan bien. No te dio tiempo ni a que se te pusieran un poco amarillo los dientes por arriba. Que mala suerte tuvimos todos, Ostra. Un abrazo amigo.
EL libro se llama Asfixia y es de Chuck Palahniuk, por si le puede interesar a alguien.

Chicoostra a 21 del Horroroso Febrero de 1955

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